Mido – Corea en la City Porteña

Durante 2 meses de idas y vueltas estuvimos intentando sincronizar agenda con un grupo de amigos para adentrarnos en el maravilloso mundo de la cocina coreana y “Una canción coreana” iba a ser definitivamente EL LUGAR del encuentro.

Por fin había llegado el día D!

Una canción allá vamossssss!!!!! Pero no todo siempre sale como uno quiere… puede salir mejor también!!!

Lo cierto es que Una Canción Coreana estaba cerrado.

Lejos de frustrarnos, alguien sugirió MIDO, justo al ladito. MIDO es un BBQ coreano que promete y… si: Buena suerte mala suerte, quien sabe!!

Plan B activated!

#Donde.  MIDO está en el Bajo Flores, barrio donde además pueden encontrar supermercados y otros típicos lugares de la comunidad coreana, muy interesantes por cierto. Con una de mis amigas de la patida imaginamos por un momento los supermercados abiertos y las cosas que hubiéramos podido comprar…. más que la gloria misma, pero bueno, todo no se puede, estaba todo cerrado -día inhábil era el motivo-.

#Ambiente. El lugar es austero, re sencillo, simple y autóctono. Su entrada no dice nada… una puerta pequeña con un cartel colorido en coreano -que si no es porque hay un 1575 que te da la pauta que llegaste, pasás de largo- y una escalera negra que conduce hacia un primer piso y a unas rojas rejas que abrirán las puertas de una experiencia diferente.

Así como en mi niñez existían los libros de elige tu propia aventura en MIDO pasa lo mismo: El comensal se transforma en cocinero por un rato y podrá elegir dentro de la oferta en mesa todo lo que quiere y puede comer.

#ElMorfi. No hay carta ni menú. Los camareros hablan poco y su trabajo consiste en ser educados, recibir pedidos y no parar de traer cosas a la mesa.

No hay platos ni tenedores: Hay palitos coreanos (son redondeados y de metal) y te traen cucharas soperas.

No hay vueltas ni lugar para snobismos.

Cada mesa tiene una parrilla en el centro a la que una vez sentado se le agregarán las brasas y un extractor que es un tubo de aluminio que cae sobre la parrilla y evita -no con suficiente éxito jajaja- que salgas ahumado del lugar.

La experiencia vale la pena. Me pareció muy enriquecedora y cultural.

Una vez que te sentás -sin importar que de 8 que éramos faltaban 4- te empiezan a traer sin que lo pidas, todo lo que te puedas imaginar para empezar a vivir la experiencia MIDO: fundamental el bulgogi -carne de cerdo y de vaca crudas con un marinado muy rico cortada en lonjas-, y langostinos de generoso tamaño. Todo viene en una bandeja junto con una pinza para que puedas ir disponiendo la carne prolijamente en la parrilla. Nosotros empezamos timidones poniendo en la parri de a dos o tres pedazos, peeeeero mirando las otras mesas nos dimos cuenta que la onda era vaciar el plato completo en la parrilla en forma prolija e ir haciendo todo junto de modo tal que lo del centro salga primero y lo de los bordes después.

Vale destacar que a medida que se iba ensuciando la parrilla te la van cambiando SIN PEDIRLO.

Junto con la carne cruda y en cazuelas y platos pequeños empieza un desfile interminable de acompañamientos e ingredientes que junto con la carne conformaran una velada muy original y que he personalmente disfrutado mucho.

#Sides. Nos trajeron: Tofu especiado, nabo con una salcita muy buena, mondongo en finas tiras, algas hidratadas (dulzonas), algas secas, kimchi muuuy bueno, maní frito picantón -muy rico-, salsas varias, lechuga para armar rolls, tortilla de huevos muy sabrosa, cuencos de arroz blanco, dumplings de cerdo muy ricos con su salsa (a la parrilla quedaban buenísimos), arroz blanco, pescado hecho entero a la parrilla (que es como más me gusta) y por supuesto la estrella: unas RIQUÍSIMAS ostras con una salsa picante muy buena.

Hacia el final te sirven una sopa humeante y MUY Buena con gustito a jengibre, ajo… muy bien sazonada a la que agregan trozos de tofu.

Podes comer todo lo que quieras las veces que quieras.

El menú incluye gaseosas, aguas, cerveza, soju ( un fermentado de bambú coreano MUY RICO que sugiero probar)…

#NoHabemusPostre.  ATENCION GOLOSOS: En MIDO no sirven postres. Pero, lejos de dejarte sabor amargo -o salado- a cambio te traen un pava con un líquido espeso blancuzco bien helado. Nos explicaron que se trataba de una bebida típica hecha con agua de arroz y azúcar. Muy rica!! Refrescante! Nosotras ya la imaginamos con lemongrass y jengibre como variante para los días de calor. Muy buena para cortar lo salado y muy original por cierto.

Me fui feliz, empapada de una cultura gastronómica milenaria de la cual al menos yo no conocía tanto. Conocimos gente educada, amable, atenta y que nos recibió con los brazos abiertos.

#$ Precio? Aprox $ 700 por persona, all inclusive.

Solo efectivo.

Les dejamos fotos y como siempre les decimos: ANIMENSE a lo desconocido y prueben otros sabores, disfruten de la multicultural Baires!!!

Y recuerden: La vida es aun más bella si comen rico💖