Esta es una maravillosa receta de dale la vuelta al día, la mole es un plato símbolo nacional en México y suele prepararse en bodas y otras celebraciones.
Cuenta la leyenda que los mexicanos en la antigüedad usaban el término mulli para referirse a un guiso o una mezcla y esta palabra ha llegado hasta nuestros días como «mole» y se utiliza para referirnos a cualquier carne guisada con una salsa elaborada a base de chiles, especias y, frecuentemente, chocolate. En mi caso en lugar de chiles usé pimentones.
No deja de ser un guiso y como tal tiene poco margen de error.
Manos a la masa!!
Empezamos pelando la cebolla y el ajo. Picamos también el pimiento rojo, todo en daditos chiquitos.
En una sartén de hierro preferentemente ponemos un generoso chorrito de aceite de oliva. Las doramos bien en la sartén y dejamos que se doren hasta que tengan un bonito color caramelizado. Reservamos
En la misma olla agregamos las verduras y dejamos que se rehoguen a fuego medio en el mismo aceite durante 5 minutos con cuidado de que no se quemen. Añadimos el tomate (yo usé tomate de lata porque son más predecibles que los tomates de la verdulería que suelen tener poco gusto) y todas las especias menos el cacao (es decir el pimentón dulce y picante, el tomillo, el comino, el clavo, el laurel y la canela). Revolvemos un poco y añadimos las pechugas al conjunto.
Subimos el fuego e incorporamos el vino. Dejamos cocinar un poco para que se evapore el alcohol y cubrimos con agua caliente dos dedos por encima de las pechugas. Rectificamos el punto de sal, tapamos la olla y dejamos cocer a fuego lento hasta que las pechugas estén bien tiernas… lo que les llevará 45 min aprox.
Por último agregamos el cacao el polvo y dejamos cocer despacito 5 minutos. En este momento sacamos las pechugas y reservamos. Sacamos también la hoja de laurel y trituramos la salsa con una minipimer. Si quedara muy espesa agregamos un poco de agua hasta obtener la consistencia deseada. Este es el momento de rectificar cualquiera de los ingredientes… si te gusta el picante podemos agregar una puntita de cayena o si lo prefieren más dulzón un poco más de canela.
Con la ayuda de un tenedor, desmigamos las pechugas de pollo y, aparte, sacamos los granos de la granada y reservamos.
Emplatado! Podés servir tu mole en pequeños cuenquitos con la granada por encima. Hay quienes le agregan arroz blanco o tortillas.
Como sea es un plato SUPER RICO y no van a poder parar de comerlo.